29 abr 2011

Sin título


Por horas, el derrocamiento de los párpados
se evidencia en dolores y ausencia,
en desgaste y crisis de razones,
en muerte pasajera hasta mañana.

Presionan como martillos de puños
la hosquedad de mi vida inmotivada.

La analogía certera declina el hundimiento de los párpados
a la intencionalidad flébil de un mañana de esperanza,
con emociones y versos pujando impetuosos.